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Los cambios en los adolescentes de todas maneras llegan.

En el crecimiento la adolescencia es una de las etapas más importantes, mira como optimizarlo.

La palabra adolescencia proviene del latin adolescere que significa crecer, desarrollarse, pero pareciera, que viene de la palabra problemas.

Pubertad proviene del latín pubere, o que se cubre de vello el pubis.

Si nos referimos a los orígenes de las palabras, no dicen ni el uno por ciento de los cambios, conflictos, esperanzas, tentaciones, puntos de inflexión.

Claro, que estos problemas nosotros los hemos creado, aumentado y asimilados como normales. En las sociedades primitivas o remotas de la “civilización” estos conflictos o cambios en la adolescencia son practicamente inexistentes.

En estos grupos humanos, los niños pasan por una etapa de pubertad y poca adolescencia. Se les hace un rito, pruebas o enseñanzas y los pasan de niños a adultos sin más ni más y asi han vivido bien organizados por cientos de años.

Pareciera que los problemas de la adolescencia los hemos magnificado en las grandes ciudades, ya sea por el exceso de tolerancia, el exceso de libertades o las tendencias actuales de no saber a donde se dirije la humanidad, menos la juventud.

Pubertad y adolescencia

La pubertad y adolescencia se encuentran íntimamente ligados, ya que nacen juntos. La pubertad se refiere más al aspecto biológico y puede terminar primero que la adolescencia, pero a la vez los cambios y desarrollo hormonal producen conflictos biológicos que se trasladan al comportamiento.

La adolescencia se refiere más a la maduración para que se convierta en adulto. Se trata de no envejecer sin madurar, no crecer sin ser responsable y útil en la sociedad. ¿Cuando ocurrirá la maduración?, eso es algo que se notará, aunque algunos nacen ya maduros.

Pubertad y adolescencia se entremezclan y al final terminan con todo un hogar compartiendo los cambios que trastocan la vida familiar en general.


Los padres a menudo no se dan cuenta que sus hijos han dejado de ser niños y cuando se dan cuenta, hasta comienzan a intervenir las llamadas telefónicas, revisarles los bolsillos y tomar medidas que más traen conflictos que enseñanzas de crecimiento, esto es fuente de mayores problemas.

Cambios en la adolescencia

De repente la familia se va ha pasear el fin de semana como se acostumbraba. Pero los niños ya no quieren salir con los padres, prefieren salir con sus amigos. En ese momento, existe un punto de inflexión que debe ser tomado muy en cuenta.

Son varios los puntos de inflexión o cambios a tomar en cuenta, como las decisiones de vestir diferentes, el mirar hacia el sexo opuesto, cuestionar las decisiones familiares, descuido de los estudios y demás.

Igualmente el cambio de voz, vellosidades en diferentes partes del cuerpo, crecimiento de los senos en las mujeres y otros.

Pero, lo que nunca se debe perder de vista es su crecimiento total. No solo físico, sino mental, espiritual, valores, sexualidad y educativo.

Los adolescentes quieren cambiar al mundo.
Los adolescentes quieren cambiar al mundo.

Eso debe ser nuestra principal preocupación y no perseguirlos ni acosarlos por toda la ciudad.

Padres y adolescencia, pautas

La meta es conseguir su maduración, los cambios físicos deberían caminar sin problemas si su alimentación y ejercicios físicos son saludables. Los padres y la adolescencia deben ser un binomio o una sociedad cuya meta es la armonía de ambos.

La mira de los padres es ver como asimilen las responsabilidades y para ello se debe considerar la alternativa de que participen en clubes o instituciones en donde la organización y el respeto sea una característica básica.

Que cumplan con los horarios pre establecidos, que hagan labores obligatorias dentro de la casa. Los permisos para salir con sus amigos deben ser ganados o condicionados a normas.

Al comienzo costará trabajo y amarguras a los padres, pero se debe ser firme. El simple hecho de no ir a un baile para un adolescente, para ellos, se juega su vida futura. Los puntos de referencia son totalmente diferentes a los de los padres, inclusive de unos padres a otros.

Los permisos deben estar supeditados al cumplimiento en los estudios, al orden de sus habitaciones, al ayudar en las tareas el hogar.

Tanto a los varones como a las damas se les debe enseñar a cocinar, hacer el aseo de la casa, que participen en la decoración y arreglos de la casa. Si tienen niños, a cuidar de los hermanos menores.

Debe enseñárseles el profundo respeto por los lazos familiares, a visitar a la familia por parte de ambos padres. Nunca dejar de abrazarles. Nunca dejarles salir sin despedirse y que digan a donde van. Igualmente deben reportarse al retornar al hogar.

Si se demoraran, deben informar de su demora llamando telefonicamente o enviando el recado con alguien.

En fin, la idea es que logren madurar, todo lo que sea crecimiento, responsabilidad, es lo que logrará el objetivo. De otra manera los seguiremos persiguiendo hasta cuando tengan 50 años.

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